PLAZA BOLIVAR DE BARINAS

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ESTATUA PEDESTRE DEL LIBERTADOR PLAZA BOLIVAR DE BARINAS

martes, 28 de enero de 2014

LLANO ADENTRO  EN LETRA VIVA

(Volumen II)


LA GUERRA FEDERAL

En 1858 se prende la antorcha de la revolución; pero es el 20 de febrero de 1859, al proclamarse la Guerra Federal en la ciudad de Santa Ana de Coro, cuando se enciende definitivamente la hoguera de la revolución.
Hoy día se puede afirmar con certeza que en el proceso federal se enfrentaron dos ideologías, combatidas con dos formas de concebir la guerra. Las fuerzas patriotas de la revolución, comandadas magistralmente por Ezequiel Zamora, un hombre de innegable cualidades militares pero de formación empírica; y las fuerzas gubernamentales regidas por Manuel Vicente de Las Casas, oficial graduado en la academia fundada por el teniente coronel Juan Manuel Cajigal.
Por ser escenario de la revolución, como en el período de la Independencia, Barinas sufre los avatares de la guerra. En todo su territorio se originan escaramuzas y enfrentamientos entre grupos oligarcas y federales.
En Barinas, el bariniteño Napoleón Sebastián Arteaga sería el ideólogo de esta revolución, llamada Guerra Larga o Guerra de los Cincos Años. En su natal Barinitas, los godos son derrotados por seiscientos hombres de los liberales comandados por el Coronel Natividad Pettit y José Ignacio Pulido; los derrotados huyen a la provincia de Mérida.
El pueblo de Calderas casi desaparece debido a los constantes ataques de los oligarcas  andinos y en otro pueblo cercano a las riberas del Apure, Nutrias, hubo sucesivos combates entre las fuerzas oligarcas comandadas por el general Facundo Camero y las fuerzas revolucionarias dirigidas por el general Pedro Manuel Rojas Mercado.
Siguió avanzando el tiempo y se fue sembrando en el alma de los hombres la esperanza redentora, como no ha dejado de ocurrir en este país, lleno de desengaño y promesas incumplidas. Promesas de patria libre y de igualdad social para todos.
Por ello es que el 10 de diciembre de 1859, cuando los campos de Santa Inés sirvieron de escenario de una de las más importantes batallas ocurridas en toda la historia política y militar de Venezuela, desde Coro a Barinas sólo se oía en la voz de hombres y mujeres impregnados de sueños y esperanza redentora el canto de la federación.


El cielo encapotado
anuncia tempestad
y el sol tras de las nubes
pierde su claridad.

Las tropas de Zamora
al toque del clarín
derrotan las brigadas
del godo malandrín.

Aviva la candela
el viento barinés
y el sol de la victoria
alumbra en Santa Inés.

¡Oligarcas, temblad,
viva la libertad!

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